A 208 años de esta heroica batalla.
Es considerada de las batallas más importantes para la gesta libertaria, aludiendo que Achaguas fue centro de poder económico y militar al mando de la primera lanza mundial José Antonio Páez, por ende la Batalla de Mucuritas se llevó a cabo el 28 de enero de 1817, en este sentido, Becomo Barrios, citado por Ortiz, nos explica esta acción de armas de la forma siguiente:
‘‘En las cercanías del paso del Frío tuvo lugar la reunión de las fuerzas del coronel SEBASTIÁN DE LA CALZADA con las del general MIGUEL DE LA TORRE, el primero venía de Cúcuta por las vías de Mérida y la selva de San Camilo. El segundo había salido de paso con tres batallones de infantería (Cachirí, Vitoria y 3 de Numancia), tres escuadrones de caballería (entre ellos uno de carabineros) y un escuadrón de artillería.
Mientras los realistas ejecutaban este movimiento de aproximación, Pez salió en dirección de Las Mucuritas, donde esperaba reunirse con RAMÓN NONATO PÉREZ. La reunión se efectuó a unos cinco kilómetros de este campo, escogido por Páez para librar el combate.
En este orden el Bachiller Ortiz refleja que “El 27 de enero pernoctó La Torre en el hato del Frío”, también distante de Las Mucuritas unos cinco kilómetros. Respecto a los efectivos del jefe realista, Páez acusa en su Autobiografía tres mil infantes y un mil setecientos jinetes, cantidad por encima de la que informa en oficio enviado a Bolívar el 18 de febrero: “más de 1.000 infantes 800 caballos”.
Nuestra opinión – dice Bencomo Barrios – es que las cifras verdaderas son las del parte, por haber sido emitido este documento apenas pasado dieciocho días de la acción, por lo tanto, el 28 reanudó Páez la marcha, y al notar que La Torre también avanzaba hacia el mismo campo, hizo un desplazamiento oblicuo para ponerse a favor del viento: “hasta tomar el Barlovento”, dice el Centauro. La razón de tal evolución no era otra que evitar el efecto enceguecedor del polvo, del humo, y sobre todo de la ceniza de la vegetación consumida por el fuego días antes.
Obtenida esta posición ventajosa, Páez formó sus hombres (1.100 jinetes) en tres líneas: la primera la mandaba RAMON NONATO PEREZ y ANTONIO RANGEL; la segunda tenía por jefe a RAFAL ROSALES y DOROTEO HURTADO; la tercera de reserva, quedó bajo el mando de CRUZ CARRILLO. El dispositivo realista aparece describo por La Torre en su parte; “La Columna de Cazadores en Batalla de cuatro en fondo; el tercer Batallón de Numancia en columna cerrada en retaguardia del y otro a su retaguardia como, reserva”. Dice La Torre que la caballería estaba en el ala izquierda y guarda silencio en cuanto a su ala derecha; en cambio Páez afirma que en ambas alas la había; es probable que lo dicho por el jefe patriota sea lo cierto por ser elemental en táctica el proteger los flancos con unidades de esta arma cuando no es posible apoyarlos en obstáculos naturales (ríos invadeables, ciénagas y otros accidentes); además, la maniobra de Páez estaba concebida en función de tal dispositivo.
La iniciativa para el combate la tomó La Torre cuando avanzó sobre los patriotas y abrió fuego contra ellos. En este momento, la primera línea “cargó vigorosamente” y a media distancia se dividió a derecha e izquierda para atacar el flanco a la caballería que formaba las alas de la infantería enemiga. Páez había instruido a sus hombres para que se desplegasen en aparente derrota, al ser rechazados, y que volvieran caras cuando notasen que la segunda línea patriota entraba a la carga contra la retaguardia de la caballería enemiga, ocupada en ese momento en perseguir la primera línea.
La operación se ejecutó de acuerdo con el plan inicial y pronto quedó La Torre sin caballería, aparte de unos doscientos húsares europeos. La hábil maniobra de Páez había alejado a los jinetes del apoyo que podía brindarle la infantería. En este momento, cincuenta hombres que Páez había preparado, dieron fuego a la sabana y rápidamente la infantería realista se vio envuelta por llamas.
El maestro Omar Viana en su discurso de orden, expresa citando a Morillo,” Esta acción de guerra del campo de la mucurita tuvo un especial reconocimiento por el General Pablo Morillo quien escribió en un manifiesto: ‘‘14 cargas consecutiva sobre mis cansados batallones me hicieron ver que aquellos hombres no eran unas gavillas de cobardes pocas numerosas como me habían informado, si no tropa organizada que podían competir con las mejores de su majestad. el Rey.”.
Es de resaltar que el monumento que hoy refleja la ontología en el campo inmortal de Mucuritas, fue construido con motivo del sesquicentenario de la batalla por el Gobierno regional del Estado Apure que dirigía Don Ricardo Montilla.
Fuentes Consultadas: Omar Viana Cronista oficial de Bruzual, Luis Ortiz Infante, Autobiografía de José Antonio Páez.
El Dr. Alonzo Pérez Orasma es Cronista Oficial de la Ciudad de Achaguas, estado Apure